Esta semana te traigo una receta casi tan inusual como la de la anterior entrada, y es que además se complementan perfectamente. De hecho, el bizcocho de vino tinto y chocolate negro que te enseñé el otro día lo rellené precisamente con este frosting de queso semicurado.
¡Créeme! Esta combinación está de muerte. A ver, vino tinto y queso siempre funcionan, y esto es en versión dulce; ¿qué puede salir mal?
La receta del frosting de queso semicurado.
Es bastante posible que te suene más el frosting de queso crema o el de queso mascarpone, los grandes representantes del queso en la pastelería. Son unas opciones muy buenas si no te gustan los quesos más fuertes como alternativa a este frosting de queso semicurado.
Pero yo hoy te presento esta opción algo más arriesgada. Ya sabes, hay que arriesgar de vez en cuando. ¿Nos ponemos a ello?
Ingredientes:
. 80g mantequilla sin sal
. 300g azúcar glass
. 150g crema de queso semicurado
Elaboración:
Para preparar este frosting de queso semicurado, lo primero que vamos a hacer es batir la mantequilla con nuestra amasadora utilizando el batidor plano o unas varillas eléctricas sino tienes amasadora. Batiremos a velocidad alta durante un par de minutos.
Una vez que tengamos la mantequilla bien blandita añadiremos el azúcar glass, el cual tamizaremos previamente y batiremos a velocidad alta hasta que la mezcla blanquee.
— TIP —
Nada más incorporar el azúcar comenzaremos batiendo a velocidad mínima hasta que el azúcar se integre. Básicamente porque si comenzamos a velocidad máxima saltará el azúcar por todos los lados. Yo ya te he avisado eh?
El último ingrediente que tenemos que agregar es la crema de queso semicurado. Nuevamente volveremos a batir hasta que obtengamos una mezcla uniforme.
Y ya tendremos nuestro frosting preparado y listo para utilizarlo con la receta que prefiramos, como el bizcocho que te enseñé el otro día (que puedes consultar AQUí).
Ahora toca que la pruebes y me digas cómo va.
Muamua!